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Las flores, la base de la apicultura.
Sin flores ni agua cerca, las abejas no se desarrollan. Durante la primavera y el verano, las abejas salen a visitar las flores, de las que recogen la materia prima para elaborar su alimento (el néctar y el polen), ayudando de paso a la polinización y colaborando en la fecundación de las plantas. Asegurando la supervivencia de la flora silvestre e incrementando ls cosechas de los cultivos, tanto en calidad como en cantidad.
Nuestras abejas viven en Galicia, en el monte Farelo, concello de Agolada. Aqui podemos encontrar una rica flora melífera: El castaño, el brezo, la retama, la silva y muchas otras flores silvestres.
Como resultado de este tesoro que nos ofrece la naturaleza, obtenemos una miel gallega de alta calidad. Con un alto porcentaje de castaño, color ámbar oscuro y sabor intenso y dulce.